domingo, 28 de febrero de 2016

-Si hoy fuera el último día-


Nunca me gustó beber, jamás me gustó la sensación de mareo y pensamiento ligero de estar fuera de los sentidos… tal vez sea algo relacionado al control, del cual soy un aferrado. Es como estar borracho pero en tus sentidos y ser espectador del mundo a través de una realidad alterada.

Puedes pensar, lo suficientemente claro como para escribir, como lo estoy haciendo ahora, incluso aislarte del mundo con tus audífonos Beats Studio, como lo estoy haciendo ahora, escuchando la versión acústica de “Hotel California” que dista mucho de ser mi favorita de la banda, sin embargo, en verdad pocos logran mantener la perfección y maestría en voz y liderazgo como Glen Frey y Don Henley así como pocos logran acercarse a la perfección como Don Felder, Joe Walsh y Timothy B. Schmit. La canción ha terminado, otra comienza y con esta suenan las guitarras, el bajo y la cadencia que me trasportan a otro momento, a un lugar seguro cuando era muy niño y me sentaba a ver a mi papá tocar la guitarra… entra un “solo” de Joe, único, tiene todo su sello… es sublime y me dejo atrapar y cobijar por él, de nuevo soy un crío que atentamente observa a su padre tocar con destreza para él nunca antes vista. Mi mente de nuevo se enfoca, en este momento esa sensación se ha ido, me permite un minuto de lucidez real que no dura realmente mucho más y con la armonía de las voces cantando al unísono, complementándose, haciéndose una sola se dan las notas finales en perfecta unión.

Desde que empezó esto, me he preguntado una y otra vez ¿por qué yo? La realidad es que la respuesta es una sola… ¿Por qué no yo? Ignoro la condición, por momentos puedo… regresa e intento no pensar… si la ignoro si no se va, al menos puedo pretender que soy normal.
No sé cuánto quede, cuanto aguante, si aguantaré pero una cosa es un hecho… Me ha gustado mucho esta vida. Tuve una fortuna incalculable, incuantificable… Amor, pasión, sueños, esperanzas, ilusiones, experiencias… Una madre, un tío y un hermano que siempre estuvieron ahí para mí en las duras y maduras, una familia extraordinaria con unos primos y primas maravillosos, amigos de verdad con los que viví mil y un aventuras, unas llenas de felicidad y otras con desalientos. Tuve la fortuna que el amor siempre fue mi amigo y me favoreció por encima de otros, lo que me permitió obtener mucho más de lo que muchos otros obtienen amar y ser amado… tengo una mujer extraordinaria, unos hijos que han traído luz y calor a mi mundo, dándome propósito para alcanzar objetivos y empujarme fuera de mi zona de confort para no dejar de dar lo mejor de mí y música –MUCHA MÚSICA- que siempre me acompañó… aún cuando estuve solo y por ella nunca lo estuve realmente.

Recuerdo una nota qué leí en 2014 en el Huffington Post que se titulaba -Si hoy fuera el último día- y pienso por un momento… hoy es el día… más allá… sólo te quedan unas horas ¿Qué harías?
-Me fumaría un par de cigarros mientras me bebo un par de Guinness heladas, escuchando lo mismo a The Eagles que a Hall & Oates o a Bublé… -Así de ecléctico- mientras, le escribiría una carta de adiós a quienes les importo, haciéndoles saber que estoy tranquilo y que tal vez… nos volveremos a encontrar. Llamaría a mi madre y a mi tío, solo para conversar un momento y decirles que los quiero. Besaría y abrazaría a mis hijos, los arroparía en sus camas y los miraría dormir por un rato. Besaría a mi mujer, me perdería un momento en sus brazos respirando su aroma, sintiendo su calor. Me daría un buen baño, me afeitaría la barba, limpio a la perfección me vestiría con lo mejor que tengo para esperar a quien venga por mí. Sé que tendría miedo, así que tendría a Cachita conmigo. Pondría algo de música -Sinatra definitivamente- y me encendería otro cigarrillo. Me gustaría llevarme un libro conmigo pero son tantos los que quiero que no sabría cual elegir… Esperaría, impaciente como siempre he sido, ese último momento.
No dejo nada material, no lo tengo. Mi legado son mis hijos, las letras plasmadas en mi pobre intento de ser escritor y el árbol que planté. Me voy triste por dejar atrás lo que conozco pero me voy con muchísimo más de lo que muchos jamás, han soñado incluso con tener y una última cosa… antes de cruzar la puerta le daría gracias a Dios por todo.

Al final, comparado con un gran todo, no es importante lo que tengo o porqué me dio, pero una cosa es un hecho… ¡Que hermosa es la vida!

José E.Urioste Palomeque

Febrero 29 2016

martes, 12 de enero de 2016

-Del mito a la leyenda... Sinatra, 100 años-

Imagina un silencio incómodo… todo mundo en la oscuridad espera impaciente cuando de pronto, los reflectores del teatro se encienden, la gente se emociona, comienza a aplaudir y la sección de metales y percusiones de la orquesta revela lo que está por venir. Camina al escenario con su tradicional inmaculado tuxedo negro y la gente ¡se vuelve loca! En una mano un cigarrillo Camel sin filtro y frente a él un micrófono Neumann U47 al que le hace el amor con cada nota de cada canción. Es la entrada característica de una leyenda viviente –LA VOZ- El Presidente del Consejo, El viejo de los ojos azules… Frank Sinatra.


"That's life (that's life) that's what all people say
You're riding high in April,
Shot down in May
But I know I'm gonna change their tune,
When I'm back on top, back on top in June"



El pasado 12 de Diciembre, Frank hubiese cumplido 100 años de edad. La pregunta obligatoria que debemos hacernos es: ¿Qué hubiese hecho este ícono de la cultura pop moderna? Podemos suponer que muchas cosas… pero dos son posiblemente las más factibles. Una GRAN fiesta ya que si había algo que Sinatra sabía hacer, era estar de fiesta y por supuesto, como estar absolutamente feliz ya que si había algo que Frank amaba, era la vida y cada minuto de esta, tal como está registrado en el nuevo libro gráfico de su vida: "Sinatra, The Photographs, presentado el pasado 27 de Octubre de 2015, una obra de Bárbara Sinatra y Andrew Howick, un joven fotógrafo cuyo trabajo fue compilar un sinnúmero de imágenes de la leyenda que durante mucho tiempo permanecieron desconocidas para la mayoría de la gente.

El libro está escrito en estricto orden cronológico, empezando por una emotiva carta de Bárbara Sinatra a él, deseándole un feliz cumpleaños y diciéndole lo mucho que le hubiese gustado conocer al “viejo Frank” porqué –Nadie podía organizar una fiesta como el “viejo Frank podía.- y es que según su compañera, nadie disfrutó del amor y la vida, como el viejo de ojos azules, buscando siempre el lado simpático de las cosas.


De aquí viajamos hasta el año 1954, uno de los más importantes de la vida de Frank Sinatra ya que ese año ganó el Oscar por su participación en la cinta "From Here to Eternity"  (De aquí a la eternidad) situación que reviviría su carrera luego de una bola de tropiezos en los tempranos 50´s así como un sumamente desagradable divorcio en puerta. Su interpretación en la cinta fue tan memorable, que Columbia Records le ofreció un nuevo contrato y su relación con Ava Gardner, se estabilizó (Según varias personas el gran amor de su vida y por quien co-escribió la canción "I'm A Fool To Want You")
En este gran libro, podemos ver fotos de la pareja en sus mejores momentos. Ava solía decir: “La voz de Frank era tan especial, que me hacía llorar de felicidad… era como si frente a ti, estuviera la puesta de sol más perfecta.”  
Todas las fotografías muestran a un Sinatra fuerte, seguro de sí mismo, con una gran maestranza de su música y extraordinaria voz, tanto, que Bob Dylan públicamente expresó:
-CUANDO FRANK CANTÓ "EBB TIDE"  PUDE ESCUCHAR EN SU VOZ A DIOS, LA MUERTE Y EL UNIVERSO… ABSOLUTAMENTE TODO-

"Out of the tree of life
I just picked me a plumb
You came along and everything started to hum
Still it´s a real good bet... The best is yet to come"


En el siguiente capítulo del libro, vemos a Frank acompañado de otros inmortales: Dean Martin, Sammy Davis Jr., Peter Lawford y Joey Bishop con quien formó la más famosa “pandilla” de todos los tiempos, The Rat Pack y las fotografías dan testimonio de lo mucho que disfrutaban pasar tiempo juntos, ya sea en la preparación de un nuevo acto, jugando cartas o molestándose los unos a otros. "Fue la mayor acumulación de talento de ese período de tiempo" dijo Deana, la hija de Dean Martin, "Lo más increíble es que eran un grupo de amigos haciendo lo que amaban". Estaban en la cima de sus carreras y través de la magia de la fotografía que muta del blanco y negro al color, podemos ver esos impresionantes ojos azules más azules que nunca y somos testigos cómo se transforma el mito en leyenda.



"To think I did all that; 
And may I say - not in a shy way, 
"Oh no, oh no not me, 
I did it my way"




Sinatra, es el retrato perfecto de su esencia; el hombre que aprovechó cada momento, ya fuese de dolor o felicidad y siempre lo convirtió en algo mágico, increíble... al igual que su voz y su personalidad. En la primera página del libro hay una frase de Sinatra que dice: "Que todos podamos vivir hasta los cien años, y la última voz que se escucha sea la mía".

Bueno, cien años han sido querido Frank, y muchos, como yo, escuchamos tu voz todo el tiempo y mientras escribo esto, me tomo un descanso y pongo tres cubitos de hielo, dos dedos de Jack y un chorrito de agua en un vaso " old fashioned", dejo que la bebida repose durante un poco, no mucho, sólo lo suficiente para que los sabores se mezclen correctamente. Mientras, en mi viejo tocadiscos se rompe el silencio con las primeras armonías de la sección de metales y percusiones de la orquesta que revelan lo que está por venir… –LA VOZ- El Presidente del Consejo, el Viejo de los Ojos Azules… Frank Sinatra.

Feliz cumpleaños Frank... SALUTE, CENT’ ANNI!


J.Urioste
jeuriostep@hotmail.com